El tren turborreactor soviético abandonado, conocido como el "ER22", parece sacado directamente de una película de Star Wars.
Diseñado en la década de 1970, este innovador proyecto buscaba revolucionar el transporte ferroviario utilizando motores a reacción para alcanzar velocidades impresionantes.
Sin embargo, debido a desafíos técnicos y económicos, el proyecto fue abandonado antes de su implementación a gran escala.
Hoy, el tren descansa en un depósito ferroviario, cubierto de óxido, evocando una mezcla de asombro y melancolía.
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